Lecciones que hemos aprendido de las madres trabajadoras

10 mayo, 2017

Tradicionalmente, cuando la mujer se convertía en madre, su rol en la sociedad se veía limitado al hogar, a cuidar de sus hijos y esposo, limpiar la casa y mantener a la familia unida. Poco a poco y gracias a mujeres que han luchado incansablemente, las madres han ganado espacios antes negados como el trabajo; pero aun así no ha sido fácil, pues la sociedad ha sido muy dura con ellas, criticándolas de abandonar su papel en el hogar “descuidando” a sus hijos.

¡Pero no es verdad! Incontables estudios demuestran los beneficios para los hijos y la sociedad de tener a madres trabajadores; y por eso, hoy, en honor al día de la madre, en TinkerLink queremos ofrecer un homenaje a aquellas mujeres que han sabido sacar adelante a su familia siendo ejemplo de perseverancia, sacrificio y trabajo duro, mencionando algunas de las incontables valiosas lecciones que nos han enseñado:

1. Hay tiempo para todo: Si, las madres nos han demostrado que, con un poco de organización y planificación, todos somos capaces de llevar a cabo lo que nos propongamos. Ellas lo demuestran cada día, haciendo incontables cosas al día para que nunca nos falte nada en casa.
2. No dejes que nadie te diga que no puedes: Ellas han probado que ser madre no es sinónimo de quedarse en casa, lo que es en especial un gran ejemplo para sus hijas que al ver a sus madres trabajar, son más ambiciosas en cuanto a su futuro.
3. En casa todos ayudamos: ¡Así es señores! Se acabaron los días en que solo mamá e hijas se ocupaban del hogar porque ahora ellas están ocupadas cambiando el mundo. En el hogar, las tareas se deben repartir equitativamente, así todos serán personas más competentes en el futuro, porque sabrán… ¡hasta como lavar la ropa!
4. No lleves tu trabajo a casa: Las madres saben lo difícil que es conciliar trabajo con familia, por lo que han aprendido la importancia de dejar el trabajo en la oficina para estar presentes en casa con su familia.
5. No está mal pedir ayuda: Los retos de ser madre y trabajar son muchos, en especial si hay niños pequeños en casa; por lo mismo, las madres trabajadoras saben que a pesar que a nuestros ojos son superpoderosas, está bien que alguien les ayude, sea una niñera, un familiar o preferiblemente su esposo, con quien la crianza y cuidado de los niños debe ser compartida.
Pero la lección más grande e importante que nos han enseñado las madres es a trabajar siempre con ganas, dando lo mejor de nosotros; como ellas, que sin importar lo cansado que pueda ser su día, siempre se esfuerzan al máximo, por nosotros.